jueves, 11 de septiembre de 2014

I Congreso Liberal: Goya y los Disparates.

El pintor aragonés Francisco de Goya (1746-1828), durante sus últimos años, realizó una serie de ilustraciones que se denominaros Disparates. 

Estos constituyen la última de las obras grabadas por Goya, datando de 1815 a 1823, cuando el pintor abandona España. 
Las imágenes estaban dibujadas con aguatinta y aguafuerte, dando ese efecto en blanco y negro, resaltando los colores claros lo que realmente debería ser el centro de atención, lo que Goya defendía como "bueno".
Los Disparates eran hechos fuera de propósito y razón, representando situaciones cuyos protagonistas eran, en su mayoría, los liberales y los serviles.


Se dividieron en varios grupos, atendiendo a sus características, y al mensaje que pretendían dar dichas imágenes:
Había Disparates de miedo, en los que los liberales no se asustan ante el Absolutismo. A veces este último estaba representado por un burro como símil de ignorancia, y otras veces como ratas que pretenden dañar la libertad, representada por una mujer raptada, y el bien que representan los liberales, representado por un caballo que salva dicha libertad.

Otros disparates eran las "exhortaciones", que representaban la indecisión por escoger un bando, encontrándose a la derecha la razón y el bien, el buen camino hacia la libertad, y a la izquierda la mentira y las máscaras de la hipocresía.
Otro disparate a destacar seria el Disparate pobre, en el que encontramos a una mujer, posiblemente en similitud de la libertad, huyendo de espectros que ejemplifican a la muerte y a la ira absolutista. Esta mujer, sin embargo, vuelve a plantear la indecisión que se daba en las "exhortaciones" de escoger un bando, puesto que aparece con dos cabezas, cada una mirando a un lado diferente.
Uno de los más interesantes es el "Disparate fúnebre". En él vemos la representación de la muerte de la verdad, de la libertad, y la resurrección de la mentira absolutista. Sin embargo, eso no es todo: aparece un anciano que se lanza contra esa mentira. Se cree que dicho anciano es una representación que el propio Goya hizo de él mismo, dejando claros sus ideales y su lucha contra el Absolutismo. Otros crees que el anciano es solo un personaje más, como también ha aparecido en otros disparates como el "disparate alegre", rodeado de mujeres de amplio escote.


 Y por último, destacar ese disparate en el que vemos como la inteligencia, el esfuerzo y la constancia de los hombres razonables y libres hacen que consigan volar con alas. En contraposición encontramos esa imagen en la que los toros, en representación de los absolutistas, caen al vacío.

No hay comentarios:

Publicar un comentario